Ceremonia de Ascenso al grado de General en el Ejército Argentino

(14/04/16) Invocación Religiosa pronunciada por el Capellán Mayor del Ejército Argentino, Pbro. Oscar Ángel Naef, en la Bendición de Bastones de Mando entregados a los nuevos Generales del Ejército.
Te alabamos Señor, Dios de nuestros padres, que antes de la creación del mundo constituiste a Cristo principio y fin de todas las cosas, especialmente en lo que se refiere a nuestra vida y a lo que tú esperas de nosotros como hijos tuyos que somos.
De respetarte a Ti, Señor, como principio y fin sí sabía nuestro Padre de la Patria cuando nos enseñaba la máxima “serás lo que debas ser o sino no serás nada”: sin duda te contemplaba a Ti y en Ti descubría su destino en la vida; es más, esperaba “ser” con mayúsculas, porque hacer lo contrario es el volver a la nada, es malgastar la vida, es traicionar la causa de Cristo que nos llama a renovar todas las cosas.
Te pedimos Señor, que en este momento dirijas tu mirada bondadosa sobre quienes hoy llegan a la dignidad máxima de la carrera militar para que junto al compromiso con los deberes que deben cumplir también reaviven el fuego interior que algún día los llevó al Colegio Militar, para que fieles a ese primer amor se sientan verdaderos soldados, capaces de actos heroicos para defender a la Patria, servir al bien común y ser constructores  de la paz para nuestro pueblo.
Que bajo la protección de María de la Merced, servidora pobre y humilde del pueblo de Dios, cada uno de los recientemente ascendidos sean merecedores de la corona de gloria propia de quienes se santifican en el cumplimiento de su deber. Amén.